García tenía 22 años en 2022 cuando participó como representante estudiantil de la Facultad de Ciencias Químicas y Farmacia ante el Consejo Superior Universitario (CSU), el máximo órgano de gobierno en la Universidad de San Carlos (Usac).

El CSU lo sometió a un proceso disciplinario exprés porque señaló en una sesión que Walter Mazariegos era un usurpador en el puesto de rector. La Usac, bajo la dirección de Mazariegos, le inició un proceso para sancionarlo y fue expulsado de la universidad en enero de 2023 por el voto de 24 de los 42 consejeros.

García apeló ante el Juzgado Décimo de Primera Instancia Civil, que concedió el amparo y ordenó su reincorporación al sistema universitario. Su caso fue elevado ante las relatoras del derecho a la educación, libertad de expresión, defensores de derechos humanos y derechos a la libertad de reunión pacífica y asociación de las Naciones Unidas.

Karin Herrera, actual vicepresidenta del país, fue una de las personas que se pronunció en contra de la persecución contra el estudiante. Esto provocó que el MP iniciara un pedido para retirarle la inmunidad y procesarla penalmente.

García salió al exilio en 2023 ante el temor de enfrentar una persecución penal sin garantías de un proceso justo. El caso de su reinstalación como estudiante se encuentra en la Corte de Constitucionalidad.